China 2012, Capítulo 14: ¡Pandalandia!
Al fin llegamos a la razón de nuestro
viaje a China: Chengdú, capital de la provincia de Sichuan, situada en el
sudoeste de China. En el aeropuerto nos encontramos con nuestra guía local,
Jane. Afortunadamente, resultó ser una chica agradable y con muy buen nivel de
inglés así que poder comunicarnos con ella de forma fluida nos permitió conocer
más sobre la vida cotidiana de los chinos. El día que arribamos únicamente nos
registramos en el hotel y nos coordinamos con Jane para nuestra celebre visita
al Centro de Investigación y Reproducción del Panda Gigante.
Les cuento que, como Tesoro Nacional de
China, el panda gigante –símbolo del Fondo Mundial para la Naturaleza o WWF por
sus siglas en inglés- es uno de los animales más raros del mundo. El número
total se estima en menos de 2,000 ejemplares, incluidos los que viven en estado
salvaje en las montañas de las provincias de Sichuan, Shaanxi and Gansu, el 80%
de los cuales se encuentran en la provincia de Sichuan.
El Centro de Investigación y Reproducción
del Panda Gigante, fundado en 1987 a unos 10 kilómetros al norte de la ciudad
de Chengdú, es una base no lucrativa de investigación y reproducción de los
pandas gigantes y otros animales exóticos. Es el único de su tipo en el mundo
que está situado en un área metropolitana. Comenzó sus operaciones con seis
pandas gigantes rescatados. Para el 2008 ya contaba con 124 nacimientos exitosos
y hoy en día tiene una población cautiva de 113 pandas.
Con el fin de proteger mejor a los
pandas gigantes salvajes, Chengdú ha establecido reservas naturales en sus
localidades. La Reserva Natural Nacional Wolong es la más grande de su tipo en
el mundo y está sólo 130 kilómetros de Chengdú. El 11 de enero 2012, seis
pandas criados en cautiverio fueron liberados en un "semi-salvaje"
medio ambiente de Chengdú. Los científicos creen que el éxito en el proyecto de
reintroducción ayudará a salvar al panda gigante del peligro de extinción.
Para darles una referencia mucho más
familar, les cuento que justo en 2008, después del lanzamiento de la película
Kung Fu Panda de DreamWorks, Jeffrey Katzenberg y otros miembros de DreamWorks
visitaron Chengdú. Además de ver a los pandas en vivo, los miembros de la
expedición fueron a aprender sobre la cultura local. Sus productores dijeron
que la secuela -Kung Fu Panda 2- incorpora muchos elementos de Chengdú en la
película. El paisaje de la película y la arquitectura también encontró
inspiración allí, entre las que se encuentran el monte Qingcheng, una montaña muy
ligada al taoísmo.
A la mañana siguiente, Jane y el Sr.
Wang –nuestro chofer local- pasaron por nosotros bastante temprano para aprovechar
el día al máximo pues cuando solicitamos a nuestra agente de viajes su ayuda
para acudir a este famoso Centro, mi hermana declaró que queríamos pasar muchas
horas llevando a cabo, literalmente, todas las actividades disponibles para
turistas visitantes. Y ¡vaya que cumplió!
El centro es enorme y muy atractivo.
Amén de sus instalaciones y trabajo de investigación, ofrece atracciones
turísticas con el fin de educar a la población local y extranjera en todo lo
concerniente al panda gigante. Esto, con el fin de cultivar una cultura de
conservación de la naturaleza.
La primera parada fue en la recepción
para visitantes a fin de que Jane pudiera averiguar el itinerario de nuestra
visita. Cabe mencionar que hicimos una escala técnica en la que –perdón por la
referencia- conocimos los WCs chinos con varios botones para distintas
funciones. Lamento informar con algo de pena que no me atreví a accionar
ninguno… la verdad no soy tan valiente y no sabía qué esperar.
En el mismo centro adquirimos algunas
postales y las enviamos desde ahí pues Jane nos recomendó hacerlo de una vez
antes de que los grandes grupos de turistas invadieran el lugar. Una vez
listas, Jane nos llevó a toda velocidad –créanme que había que perseguirla, no
solo seguirla- al centro para voluntarios. Pasamos por el hospital y la cocina para
pandas y los recorrimos rápidamente antes de llegar a nuestro punto de
encuentro con los voluntarios.
Como les dije, nos habíamos adscrito a
todas las actividades disponibles así que, para mi sorpresa, nos pusieron una
vestimenta casi de quirófano y nos pasaron a conocer a los pandas en vivo y en
directo. Durante la experiencia, que compartimos con un matrimonio
estadounidense muy simpático que curiosamente radicaba en Qatar, nos tocó preparar
alimentos (cortar manzanas), limpiar jaulas, darles bambú, observar cómo les
dejaban grandes trozos de hielo con flores y hierbas (helado para panda, nos
dijeron) y sacarles infinidad de fotos y videos.
Después de aproximadamente una hora y
media, Jane acudió a nosotros para llevarnos a lugar donde nos sacaríamos fotos
con un panda bebé. Sí, son suavecitos… nos tocó con un lindo ejemplar de unos 4
meses de edad que estuvo muy entretenido mordiendo bambú con miel. Nos
regalaron una sudadera y un certificado de haber hecho nuestra donación en pro
de la conservación del panda gigante. ¡Genial!
Hecho eso, seguimos a Jane para conocer
el resto del lugar. Pudimos ver el cunero con cinco pequeños pandas, el lugar
donde están los pandas “adolescentes” y el de los adultos. Además, descubrimos
a los pandas rojos que parecen grandes mapaches pelirrojos.
Les comparto la Galería de fotos
Por último, vimos el video sobre los
pandas gigantes donde aprendimos más. Aquí les comparto algunos datos curiosos:
- Los pandas gigantes son originarios de China. Viven alrededor de 20 años en estado salvaje y 35, como máximo, en cautiverio.
- Debido a su escasez y lenta reproducción los pandas son una de las especies en peligro de extinción. Actualmente en China se castiga con pena capital a quien de muerte a un oso panda.
- Tienen en sus patas delanteras un dedo adicional que usan como pulgar. Es habitual ver a los osos panda comer relajadamente sentados en el suelo, con sus piernas traseras estiradas hacia adelante. Aunque den la impresión de ser sedentarios, trepan a los árboles con gran habilidad y son excelentes nadadores.
- No hibernan debido a que no pueden almacenar grasa en base a una dieta de bambú. El panda gigante es un insaciable devorador de bambú. Un ejemplar medio se pasa la mitad del día comiendo-literalmente: 12 de cada 24 horas-y hace sus necesidades docenas de veces al día. Hacen falta 12,5 kilos de bambú para cubrir las necesidades alimenticias diarias de un panda gigante, que arranca ansiosamente los tallos con los alargados huesos de sus muñecas, usándolos a modo de pulgares. Ocasionalmente también comen pájaros o roedores.
- Los pandas gigantes son animales solitarios. Tienen un sentido del olfato muy desarrollado, que los machos emplean para evitarse entre sí y para encontrar una hembra con la que aparearse en primavera
- Una hembra panda sólo está en celo por 72 horas al año. Las pandas hembras son muy selectivas. Empiezan a procrear a los 4 años de vida; Tras un embarazo de cinco meses, la hembra da a luz a un único cachorro o a gemelos, aunque en este caso no es capaz de cuidar de los dos.
- Cuando las madres pandas dan a luz, se quedan con sus crías de tres a cuatro meses en cuevas o en huecos de los árboles. Los pequeños pesan apenas unos 150 gramos al nacer y no pueden gatear hasta cumplidos los tres meses. Nacen ciegos y de color totalmente blanco; sólo más tarde su pelo toma las tonalidades que los hacen tan atractivos.
El tiempo se pasó verdaderamente rápido
y cuando nos dimos cuenta ya estábamos fuera del Centro… pero antes pasamos a
la tienda del Centro para comprar muchos souvenirs para traer a casa... ¡fue un
día espectacular!
Les invito a visitar el sitio web del Centro para que lo conozcan mejor… ¡vale la pena!
Siguiente capítulo: Leshan y su buda gigante